Biblios, el juego de mesa de monasterios y escribanos de iello

Biblios, de iello, es un sencillo, atractivo y divertido juego que nos pone en la piel de monjes medievales que han de conseguir los mejores recursos para tener la biblioteca más completa.

La dinámica de Biblios es sencilla.

El juego se compone de un pequeño tablero que señala los cinco elementos que persiguen los jugadores, a saber, Pigmentos, Monjes, Tomos prohibidos, Libros sagrados y Manuscritos. Cada uno de esos elementos tiene un dado asociado, que sólo sirve para indicar el número de puntos que sumará el jugador que se los lleve al final de la partida, un valor que empieza en 3 pero que subirá y bajará a lo largo de la partida.

El otro componente principal del juego es el mazo de cartas, que contiene cartas que nos permiten puntuar en cada uno de los elementos, otras cartas que representan Oro (de 1, 2 ó 3) y el último tipo serán cartas de iglesia, que son las que afectan al valor de los dados.

El juego tiene dos etapas, Fase de Regalo y Fase de Puja. En la primera, el jugador activo saca una serie de cartas, una tras otra. Cuando saca cada una, ha de elegir si quedarsela (la pone boca abajo frente a él), ponerla en el espacio público (boca arriba) o en la pila de puja (boca abajo). El jugador saca tantas cartas como para poner una en su mazo, otra en el de puja y tantas en el espacio público como otros jugadores haya. Tras sacar todas las cartas, empezando por el jugador de la izquierda, los otros jugadores toman una carta del espacio público. Así, al final de su turno, cada jugador tendrá una carta nueva y el mazo de puja habrá aumentado en una. Obviamente, el jugador deberá ser prudente pues se expone a quedarse con una carta menos buena que la que puede que salga más adelante. Tras ello, el turno pasa al jugador de su izquierda.

Cuando todas las cartas se han repartido, pasamos a la fase de puja. Se van sacando carta a carta y el jugador activo puja por esa carta (o no). Las cartas de Oro se pagan con Cartas y si el jugador puja, el siguiente deberá superar esa puja (el jugador inicial tendrá de nuevo oportunidad de sobrepujar). El jugador que gana, paga las cartas que correspondan (que se descartan) y pone la carta ganada en su mazo. Las cartas que no son de Oro se pagan con oro. El juego no devuelve cambio y si pujo 2 pero solo tiene carta de 3, pierde el excedente.

Al acabar la puja, los jugadores suman las cartas de los elementos en juego y el que tenga un valor más alto, gana los puntos que marque su dado. En caso de empate, todas las cartas tienen una letra asignada; el que tenga la letra más cercana a “A” gana.

Esta es la mecánica, tan sencilla como eficaz. El juego es divertido, y compensado independientemente del número de jugadores en liza. Sus reglas están en inglés pero una vez comprendidas, las cartas no tienen texto y es independientemente del idioma. La caja, los comonentes y las ilustraciones son de gran calidad y es un regalo para la vista como un entretenimiento digno de considerar por algo menos de 20 €.