slider-585x222

Watson & Holmes, Diarios del 221B, un juego de Ludonova ambientado en el Londres de Sherlock Holmes

Share on FacebookTweet about this on TwitterEmail this to someone

De la mano de Ludonova llega una buena noticia para los aficionados al fascinante universo de Sherlock Holmes; se trata de un nuevo juego ambientado en el Londres victoriano, Watson & Holmes, diarios del 221B. En este juego nos pondremos en el papel del doctor Watson, que intenta aprovechar todo lo que ha aprendido de su amigo resolviendo por sí mismo, con el asesoramiento del detective. Se trata de un juego competitivo para 2 a 7 jugadores que, tras solo un par de partidas en nuestro grupo de juego, ha dejado buenas impresiones y ganas de continuar con nuevos casos.

Cada partida representa un caso distinto que viene descrito en un pequeño libreto y con una serie de cartas que representan las localizaciones a investigar o los testigos a los que interrogar. Al principio alguien lee la introducción al caso, en la que se presenta el caso al más puro estilo holmesiano y se plantean las preguntas que los investigadores deben resolver. Como agradable alternativa, en cada caso encontramos un código QR que nos lleva a una narración de la introducción, perfecta para una buena ambientación.

Las cartas con las localizaciones se disponen en la mesa. Una de ellas es el 221B de Baker Street, icónica dirección del detective, a donde los jugadores acudirán cuando crean haber resuelto el caso. En cada turno los jugadores elegirán una de las ubicaciones para ir a investigar. Secretamente, leerán la carta con las pistas que contiene y anotarán -es indispensable anotar- los datos que consideren oportunos. Posteriormente la dejarán en su lugar y esperarán un nuevo turno para buscar nuevas pistas y relacionarlas hasta desvelar el misterio -“Pistas, pistas, pistas. No puedo hacer ladrillos sin barro“-.

Estamos ante un juego de mesa competitivo, no ante un juego de rol, con lo que las mecánicas de juego favorecerán cierta competitividad entre los jugadores. Cada uno dispondrá, al principio de la partida, de 10 fichas de carruaje y 1 de policía. Las fichas de carruaje sirven para pujar por las localizaciones. Podemos llegar a esas localizaciones a pie, sin invertir ninguna ficha, o en carruaje, poniendo tantas como queramos. Si un adversario puja por el mismo lugar que nosotros y nos supera en número de fichas de carruaje deberemos elegir otro lugar, aunque recuperaremos todas las fichas, menos una. Tras mirar una localización podemos conseguir poner una ficha de Policía. Un Bobby hará guardia y no dejará a nadie pasar, a menos que se emplee una ficha de Pase, con la que se retirará al Policía, o una ficha de Ganzúa, que permite acceder sin que el policía se retire. Ciertas localizaciones, además de sus pistas, ofrecen estas fichas a los jugadores.

La mecánica del juego ofrece un marco adecuado y suficiente para Watson & Holmes, diarios del 221B, pero lo principal del juego son los casos. Con tan solo una partida a nuestras espalda, el caso que hemos visto nos ha parecido interesante, desafiante y bien compuesto. Las pistas están muy bien repartidas y prácticamente cualquier localización ofrece algún indicio, por pequeño que sea. Es necesario visitar gran cantidad de localizaciones, y el caso estaba tan bien trabajado que era necesario combinar pistas de uno y otro sitio para dar sentido al caso. Como valor añadido, los textos están muy bien escritos, en un estilo sencillo y eficaz que bien podría recordarnos al de Conan Doyle. Las ilustraciones son atractivas y convencen sin enamorar.

El problema de este juego es, igual que en el también recomendable Sherlock Holmes, detective asesor, la nula rejugabilidad. Problema para quien quiera verlo así; si se quiere hacer un juego de misterio interesante ese es el tributo a pagar y un juego que por 35 euros nos ofrece 13 casos / sesiones de más de una hora de juego no es para nada desdeñable. Vamos, y los módulos de aventuras en rol son bastante menos rejugables y nadie parece quejarse. Sería, en cualquier caso, saber si la editorial tiene intención -obviamente, si las ventas acompañan- de publicar nuevos casos o colgarlos gratuitamente en su web.

Share on FacebookTweet about this on TwitterEmail this to someone

DEJA TU COMENTARIO