El dormitorio de Lope de Vega es de una humildad espartana. Una cama amplia, un gran armario, un crucifijo en la pared y un reclinatorio con una Biblia manoseada.
-Parece la habitación de un hombre devoto- observa Alonso-. Es posible que Lope de Vega haya alterado sus hábitos libertinos.
-Quien ha sido un pájaro, lo será toda la vida.- valora Julián.
-Descreído.- refunfuña Alonso. Julián sonríe.
-A la vuelta lo miramos en la wikipedia. Ahora,busquemos.
La pareja investiga en la habitación sin éxito inmediato.
-Aquí hay un pequeño arcón- localiza Alonso, bajo el armario-. Demonios, está cerrado.
-Démonos prisa, Amelia no podrá entretener a Lope mucho más tiempo.